Por supuesto que es víctima... de sí misma

Karina Bolaños fue vilmente exhibida por Youtube, mediante un video de su vida privada, lo que representa una bajeza de quien lo publicó y una situación delicada, porque fue despedida y ahora no se deja de hablar de ella y lo que pasó.

Es cierto, pero la mayoría, incluidas las fervientes feministas que ahora andan con rótulo en el pecho diciendo "Todas somos Karina", se hacen de la vista gorda sobre la historia detrás y el contexto.

Esposa del espadachín de los Arias, Víctor Hugo Víquez, la señora ostenta el Viceministerio de Juventud, donde dirige el programa de "Violencia Doméstica" -entre otros-, pero no le pesó la mano para denunciar al mismísimo Víquez el año pasado de agresión y violencia contra ella. Después aceptó que había sido falsa denuncia y que era su vida privada, que nadie tenía que meterse. Sin embargo, se me paran los pelos pensar que alguien encargada de un tema como ese en la juventud, abuse de la Ley. Porque debemos saber que hay muchas mujeres en la actualidad poniendo denuncias falsas de agresión contra sus compañeros sentimentales, con el propósito del revanchismo y de despojarlos de sus bienes materiales. Tampoco negamos, ni podríamos, que existe violencia doméstica contra ellas, como contra ellos.

En CNN dice que es víctima de un chantaje, pero resulta que no hay denuncia previa "porque es difícil de probar", pero ella sí tiene medidas cautelares porque sí fue denunciada por acoso y amenazas, incluyendo a un menor de edad. El denunciante entrega pruebas donde ella lo amenaza incluso con el poder político que tiene, diciendo que tiene amigos poderosos que lo conocen a él. ¿En qué contexto ella le dijo eso? No lo sabemos. Lo que sí sabemos es que Bolaños sí tenía muchos amigos y salieron bravíamente a defenderla, y si no los tenía, lo hizo.

¿Por qué, con ese poder político que tiene, no denunció al OIJ y abrió una investigación que la resguardara? En todo caso, parece que el OIJ podrá ahora hacer una investigación amplia y conocer lo que realmente ha pasado.

Por una situación similar, Ana Lucía Vega y Pamela Alfaro, fueron despedidas de sus trabajos en medios de comunicación. Ignacio Santos, con un discurso humanista, dice que Karina fue dos veces víctima: de la sociedad y de la Presidenta, pero Ana Lucía Vega fue relegada del canal por un asunto similar. El caso de Pamela es similar... ¿Doble moral del tico? ¿Pero de quién o quiénes en realidad? Eso nos pasa en Costa Rica: criticamos la doble moral actuando con doble moral.

Si hubiera sido hombre hubiera pasado lo mismo, hubiera sido burlado, linchado y vilipendiado, como en este caso. ¿Qué tal que hubiese sido Justo Orozco teniendo algún tipo de sexualidad con otra mujer o un hombre? Triplemente linchado, ¿quién lo hubiera defendido? Ni su familia. Al señor Clinton lo hicieron acabado en Estados Unidos, por declaraciones de una mujer, sin ni siquiera un video hecho público.

Más allá del video hay un contexto, una historia, que nos evidencian que Bolaños ni inocente ni víctima, no antes del video. Su actuación ya había producido un cuadro abusivo e inconveniente para una funcionaria pública, y no por sus actuaciones sexuales privadas, que son muy suyas y qué bueno que es una mujer que tiene una vida sexual activa -muchas no gozan de ese beneficio por el conservadurismo religioso y social-, pero en eso sí coincido con el Ministro de Cultura, Manuel Obregón, un funcionario no puede andar jugando con el poder y con la Ley por la transparencia en el ejercicio de la función pública. Mucho menos cuando maneja programas delicados e importantes para la juventud, que tienen que ver con su comportamiento.

El poder público no es de uso privado, la Ley no es solamente de aplicación en el ámbito de lo privado cuando se aplica a un funcionario público. Y este aspecto es un tema que debe abrirse a la discusión legal y social, ¿hasta dónde llega la esfera privada de un funcionario público? Todos tenemos posiciones encontradas, pero es necesario abrirnos en todo sentido a la discusión.

Y sí, el linchamiento, la burla y demás, nos dejan muy mal parados como sociedad, porque eso somos. Y ella fue víctima dos veces, de la sociedad primero, claro, pero principalmente de sí misma. Hay un contexto que lo deja claro, a mi entender.