lunes, 30 de agosto de 2010

La doble moral feminista me miente

La corrupción es corrupción aunque la realice la mismísima Madre Teresa de Calcuta. En Costa Rica, en cambio, parece que la corrupción es solo cosa de hombres machistas, según algunas.

Durante mucho tiempo tuve mucha admiración por una señora que planteaba una lucha clara por ciertos valores y principios, la vi insobornable y culta. No obstante, hasta las mamparas más prístinas terminan por sucumbir ante los actos de doble moral, esa doble moral que a los costarricenses nos arrastra y lleva a lugares impredecibles.

Esta señora se la pasó criticando al PAC los años anteriores a las elecciones, pero cuando se podía robar cámara entonces se unió al grupo que favorecía al partido, en las últimas horas. Admira a todas las mujeres, las fotografía y pone en un pedestal, pero no le importa si alguna de esas mujeres actuó mal o de manera corrupta. Lo que importa es que sea mujer, ya por eso inmaculada e inocente de actos dudosos. Abro páginas en Facebook y critico en Twitter el mal desempeño de los medios de comunicación, pero al unísono le doy unfollow al Twitter un sitio de cultura costarricense que trabaja con las uñas y sin acudir a la corrupción para sobrevivir por casi 5 años, sí, me refiero a CulturaCR. Una evidente contradicción que solamente se entiende por una razón: para la gente de doble moral no hay corrupción cuando se trata de amigos o, en este caso, principalmente si son amigAs, mujeres, femeninas.

Doble moral feminista, doble moral social y doble moral ideológica.

Los valores son acompañantes que sostienen y dan credibilidad a las personas. Nos acompañan en vida y nosotros los cargamos todos los años, porque son ellos quienes de verdad se convierten en plataforma de nuestro legado a la hora de actuar. En cambio, esas palabras moralizadoras de doble moral que escuchamos en algunos y algunas, difícilmente obtendrán nada más que una mentira vivencial; como la de muchos políticos que conocemos.

En política el tema es interesante. Los hombres hemos perdido credibilidad por los oprobios machistas que no podemos negar, entonces ahora ponen a las mujeres a enfrentarse a los problemas políticos más complejos, si no me crea sígale la pista a la Antillón, a Viviana Martín -la defensora del aumentazo y otras afrentas-, a la Taitelbaum, a la Ballestero y otras más. Incluso nuestra Presidente de la República, que vino a remendar los calzoncillos rotos de Arias. Con ellas de repente la "justicia social" es más blanda y permisiva. Pero si el corrupto es hombre, la opinión pública se lo come entero.

Que se sigan abrazando, dándose besos, tomándose fotos, pero no me pidan a mí que les crea sus mentiras de apariencia, ni su doble moral.

Por supuesto, a las mujeres buenas que son mayoría, las que amo y admiro, decirles que necesitamos más de ellas, su ejemplo sigue y seguirá siendo muy valioso para la sociedad humana.

jueves, 19 de agosto de 2010

¿Burro amarrado contra tigre suelto?

Cuando la derecha tiene intereses comunes, se alía y los defiende. Aún entre ellos existen notables diferencias (normalmente marcadas por la repartición de la tajada), pero no las dejan imponerse cuando se trata de propósitos compartidos. Ellos están en su nicho.

Cuando la izquierda tiene intereses comunes prefiere no verlos, los abandona al primer tirón. Se imponen las diferencias porque, sea como sea, ellos no están en su nicho. El socialista tiene que defenderse en un mundo capitalista e individualista. Pregona ideas de colectividad y bien común, pero siempre prevalece su yo primero. Es una contradicción, claro, pero cómo no entenderla: a pesar de sus ideas socialistas vive en un mundo priva lo individual, debe defenderse y sobrevivir en ese mundo. Cuando ese individualismo se impone en las luchas de grupo, por búsqueda de liderazgos o ventajas, entonces ya no hay socialismo que valga.

Daniel Ortega es un político enriquecido, tanto o más que muchos liberales en Costa Rica. Eso no es socialismo: es engaño al pueblo. Esa es la triste historia de Nicaragua, sin importar la ideología del gobernante siempre la gente sufre por culpa de unos pocos ricos.

Cuando alguien tiene tendencias socialistas debe ser congruente con ellas o no serlo. Lo mismo para un socialdemócrata, socialcristiano o liberal. Pero no veo por qué alguien pueda ser socialista en unos aspectos y liberal o capitalista en otros. Excepto cuando, lamentable práctica, solamente se trata de adaptar esas ideas a intereses personales y egoístas, engañando. Aquí entonces hablamos de corrupción y esa aplica a todos por parejo; el gran problema de Latinoamérica.

Ahora bien, son características descubiertas del costarricense (Láscaris, Azofeifa, Bonilla) su actitud conformista, su capacidad para el berreo y la inacción, así como los patéticos hábitos del serrucha piso, el choteo y el ninguneo. El costarricense sufre de pueril satisfacción de sí mismo (Azofeifa) y es, por definición, egoísta como Caín -desde la colonia- con apariencia de bonachón y solidario (Bonilla).

Un socialista costarricense es entonces algo realmente curioso e incongruente en sentido estricto. Con ideas de beneficio colectivo, pero egoísta; una sociedad inclusiva pero excluyente; con mucho berreo pero poca acción. En general es difícil que el tico promedio crea y predique con autenticidad y honestidad las ideas socialistas.

Pero no se lo crea todo mal, hay una característica en el ser costarricense que lo identifica al colectivismo: su actitud de serrucha piso, choteador y "ninguneador". Nosotros NO permitimos fácilmente que alguien sea o se sienta más grande que nosotros (Azofeifa). Desde los más intelectuales, escritores, artistas, hasta el más común "patas vueltas" de la calle, actúa así. En esencia, el tico es un socialista mezquino, conformista con aires de trabajador, individualista en crecimiento y con ello se declara bastante feliz, el más feliz del mundo quizás.

El socialista de corazón y el capitalista acérrimo no tienen cabida y normalmente chocan con grandes cercas o murallas humanas. En Costa Rica el ICE no se privatizó o vendió, pasó a competir. El mayor orgullo de ingeniería y desarrollo (el nuevo Estadio Nacional) del tico fue construido con la eficiencia comunista, negociado por un Presidente capitalista de derecha extrema que rompió relaciones con el ícono de capitalismo oriental para establecerlas con la potencia del comunismo mundial. El fútbol no es tan malo, aunque sí lo sea; los jugadores nunca tienen la culpa, pero son los que se equivocan y carecen de talento y ambición. Se necesita trabajo de equipo, pero siempre nos salvan las individualidades; porque los ticos promedio no sabemos y no podemos hacer trabajo de equipo.

Costa Rica no podría ser un país socialista, pero ya topó cerca con el capitalisto de derecha.

martes, 10 de agosto de 2010

Gobierno canalla e infame ante los indígenas

Desde ayer estoy en vilo, con el estómago revuelto, las palabras dignidad y respeto retumban en mi mente.

Los aborígenes costarricenses, sus representantes, han sido expulsados vilmente de la Asamblea a empujones, tratados como perros callejeros en medio de la lluvia, y eso no tiene perdón de Dios. Los conozco de mi pueblo, de Coto Brus, son gente humilde y pacífica, tan humilde que ahora están siendo humillados por un gobierno infame.

Durante 17 años ellos esperan la respuesta de gobiernos liberacionistas y del PUSC, para garantizar su autonomía, pero ahora en lugar de buscar soluciones los diputados del PLN, dirigidos por infames seres humanos como Villanueva y Viviana Martin, se ajustan a peros administrativos para no darles la dignidad y el respeto que se merecen.

Luisa Bejarano, la mujer que desde HOY es mi Héroe Nacional Indígena, se postraba en el suelo, aferrada a la pierna condescendiente de la diputada Carmen Granados (como Carmencita, la folclorista tan querida) para NO salir de la Asamblea. "De por si ya no tengo nada que perder, no tengo casa y ahora ni tengo tierra", exclamó Bejarano. Y yo lloraba por dentro y por fuera.

Para nadie es un secreto que yo respeto y admiro a Obregón, Garnier y Ávila, ministros de este gobierno, pero hoy considero al gobierno espurio, al gobierno que yo le venía teniendo respeto y tolerancia, hoy lo veo irrespetuoso e intolerante. Quiero ver a Manuel, Leonardo y María Luisa actuando a favor de estas pobres gente, porque ellos merecen la protección de nuestra cultura, nuestra educación y nuestra salud.

Pienso en todas las mujeres que ahora deberían verse reflejadas en Bejarano, no en Chinchilla y que sin pensarlo mucho deberían salir a apoyar a esta valiente mujer; que ama su pueblo, su cultura y sobre todo su TIERRA, su madre tierra, la madre de todos.

518 años después infames diputados y líderes costarricenses mancillan la dignidad de pueblos humildes y respetuosos, eso realmente me molesta y me enfurece. Más aún cuando recuerdo que además ayer 9 de agosto era el Día Internacional de los Pueblos Indígenas. Todo un oprobio, un escupitajo no solo a ellos, sino a la dignidad de los que vivimos y amamos esta tierra bendita por todos los dioses y espíritus. Un atropello que no podemos permitir, porque sería como permitir que nos atropellasen a nuestras propias madres, el origen de las vida misma. ¡Actuemos gente!
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