sábado, 25 de junio de 2011

Tener la razón es no tenerla

Este no es un mundo racional, aunque lo pretenda.

Por mucho tiempo me ha costado enfrentar a las personas tratando de argüir razones o argumentos, es casi como un caballo de batalla, o mi espada única. No obstante, hemos llegado a un mundo donde la razones en lugar de convencer, asustan, y a veces me siento víctima de esas circunstancias.

No han sido dos ni tres situaciones en que me he presentado a alguien dándole razones suficientes, que a cualquier juez imparcial convencerían, pero que son liquidadas con expresiones como "no me interesa lo que diga", "diga lo que diga, no es así", "no quiero escucharlo, usted (ad hominem) es así o asá". El debate es cansado y la gente le rehuye, en la mayoría de casos lo que te ganás es un insulto bien puesto.

Y es que quizás la razón no está en tener la razón, sino en manipularla a nuestro antojo y conveniente. Quizás la razón está en la razón de mejor quedarse callado y no disentir, como un ejercicio de sobrevivencia. Quizás la razón no existe, y es solamente un acercamiento que tenemos, una brujería como dijo Andreski -uno de los más acérrimos críticos de las ciencias sociales y su pretendida cientificidad-, para engañarnos y fingir que somos más que los animales.

Estamos en el tiempo del cuestionamiento de la razón por sí misma, de la razón en sí misma, y de la razón como arma; en una sociedad donde una especie de razón instrumental se impone, en un ejercicio de poder. La filosofía se sobrepone a esos juegos de poder, pero la gente mientras tanto sigue pensando que tiene la razón, que ella es poderosa, cuando en verdad es el arreglo de ella el que nos puede persuadir, convencer o llevar por el camino. En todo caso, siempre estará la violencia, cuando la razón es tan fuerte que los detentadores del poder le tengan miedo.

Tener la razón es no tenerla.

sábado, 18 de junio de 2011

La gran oportunidad del PAC: el 2014.

La Nación trataba de rebuscar en las diferencias internas del PAC para hacer su venta, con el tema del alejamiento de Mendoza del partido durante unas semanas por desacuerdos con Elizabeth Fonseca. Eso es síntoma de que La Nación sabe que el PAC tiene su gran oportunidad para gobernar Costa Rica en el 2014, y que a pesar de lo que quieran rebuscar, el partido se muestra ético y un poco más fuerte, y lo dice alguien que recién se integra a esta agrupación en una comisión (la de cultura) y encuentra un partido en proceso, con sistemas de información establecidos, con gente llena de bríos, con una actitud distinta.

¿Que quizás es porque Solís se alejó del partido y permitió actuar a otros cuadros? Es posible, pero la gente del PAC sabe que el 2014 es posiblemente la consolidación total, o el adiós definitivo.

El PAC es ahora un partido joven, pero serio y maduro, un partido que se ha mantenido éticamente limpio, por más que digan los fanáticos del culto liberacionista que reproducen consignas de campaña. El PAC, además, ahora estará preparado y organizado, según lo que logro percibir a ojo de tigre. Viene el congreso y ahí podré analizar y percibir mejor al partido, pero hasta hoy, con lo visto, puedo sentirme relativamente a gusto.

No creo que el PAC soporte otra derrota, y lo mejor/peor: no creo que el pueblo costarricense se permita otra derrota con el PLN. La coyuntura es favorable: el PAC tiene en Mendoza su primer presidente de un poder la República; pero además se enfrenta a un Movimiento Libertario retraído y asustado ante los ataques de corrupción (que no me sorprenden), y además estoy seguro que seguirán saliendo sospechas y certezas de corrupción del PLN; todos sabemos lo que habita ese partido y se llama "cáncer de la corrupción".

En ese panorama el PAC tiene oportunidad de ir creciendo, ligado a un trabajo fuerte y decidido, pero bien pensado, en las comunidades periféricas del país; donde siempre se pierde. El PAC tenía que cambiar de actitud, ser incluso más práctico y funcional para las elecciones, y según lo percibo, ese es el camino trazado.

Ottón Solís es el candidato de la prensa y de los contrarios, en todo lado lo reiteran como candidato: el diario Elpais.cr -que no lo aprecia mucho que digamos- publicó recientemente una caricatura donde lo rechaza ad portas, al presentarlo como un pastor religioso y soberbio. En las redes de Internet, en comentarios de artículos y en los medios, siguen dándolo por candidato, preguntándole y ya él no sabe cómo decirles que no, que él decidió no participar para este período. Esta es una situación que me parece inédita, ¿por qué la prensa y la oposición quieren a Solís de candidato? ¿Será porque le temen o porque más bien piensan en él como un soberbio que seguirá perdiendo elecciones porque el pueblo no lo aprecia? Quizás un poco de ambas.

Es el mismo Ottón, en su claridad de siempre, quien incluso dijo ver en Juan Carlos Mendoza un candidato. Eso, confieso, me sorprendió. Aún es pronto para pensarlo, pero en todo caso dependerá del éxito o fracaso de la alianza para llevar el directorio de la Asamblea, de su trabajo para lograr un puerto seguro y feliz.

El PAC baraja a Macaya, quien ya está en campaña, a Luis Guillermo Solís, que también se mueve en redes, y por último al fantasma de Epsy Campbell, la candidata con arrastre popular pero que genera desconfianzas a los interno del partido, ante comportamientos anteriores que el partido le resiente. Si la convención es abierta en el PAC, el otro gran tema, Campbell tendrá gran oportunidad, no solo de ganar la convención interna sino de ser la próxima Presidenta del país. Si es lo contrario, es posible que Macaya logre ganar y ser el candidato de la agrupación. Eso está por verse, pero el partido está trabajando y está decidido: esta vez tiene que ganar las elecciones y gobernar por primera vez Costa Rica.
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