viernes, 16 de septiembre de 2011

Cuando el resultado es mejor que el reproche: PAC y Plan Fiscal

Me desgarbé, despotriqué contra lo que estaba haciendo Ottón Solís en su negociación en Casa Presidencial, a lo que yo pensaba era a espaldas del partido y de los diputados. Me ofusqué creyendo que el PAC estaba haciendo política tradicional, cosa que criticaba fuertemente. Lo acepto, me molestó el modo en que se hizo todo, más después cuando La Nación aprovechó la circunstancia para dejar bien patente que el acuerdo entre Chinchilla y Solís (entre el gobierno y el PAC) se había dado antes, en Pérez Zeledón.

Luego me entero que Solís iba autorizado por la fracción del partido, pero no por la alianza. Luego leí las percepciones de los "precandidatos" del PAC en apoyo a la gestión y estudié la coyuntura, el cómo se habían logrado 17 propuestas (de 18) para modificar un plan fiscal que parecía enterrado: el gobierno no tenía salida y se visualizaba como un inminente desastre en los años siguientes, sin recursos, sin credibilidad, sin apoyo. ¿Qué hizo el PAC? Simple: no dejar que el gobierno, junto con el país, se viniera en picada. ¿Qué hizo el PAC? Aprovechó la coyuntura para negociar un plan fiscal justo, donde los ricos tributen como ricos y los pobres como pobres. Incluyó impuestos impensables para un gobierno liberacionista, logró una alianza de equilibrio, una alianza que bien podría ser el quiebre que necesita este país hacia políticas progresistas, progresivas y de redistribución de la riqueza, esas políticas que le quitó el séquito Arias y secuaces. En definitiva, estuvo el país por encima de los partidismos.

Y la izquierda despotricó contra el PAC por negociar como partido, no como alianza, pero entonces podríamos preguntarnos, ¿se hubiera logrado lo mismo con el ML, el FA, el PUSC y el PASE en esa negociación? No lo creo honestamente. ¿Política tradicional? No estoy seguro, eso me sigue manteniendo incómodo, pero al menos sí política efectiva en conexión país.

Solís reafirmó, a pesar de la necedad de muchos especuladores, incluyo mis dudas en el paquete, que no sería candidato del partido. Los demás precandidatos le creyeron y lo apoyaron en su gestión, no hubo fraccionamiento en el PAC, pero sí mucha discusión y desacuerdos, naturales en una agrupación política variopinta como esta. Al final, el partido salió airoso, la propuesta de negociación (al igual que la anterior de la alianza legislativa) fue un éxito, la misma Chinchilla reconoció en el PAC a un partido maduro y responsable.

Al final, sin analizamos por el fondo, más allá de las conspiraciones y suposiciones fanáticas, Costa Rica tendrá un plan fiscal producto del acuerdo y no la imposición (al estilo anterior de los Arias), que además tendrá elementos vitales de la propuesta PAC. ¿Empieza el PAC a gobernar el país desde ya? Podría ser. Yo en particular soy optimista y considero que viene el tiempo del PAC en Costa Rica, después del aprendizaje, de la niñez y la juventud, ahora la época de la adultez, donde se deberá demostrar de qué madera está hecho este partido.

Reproches habrá siempre, pero el resultado fue el mejor. ¿No es eso lo que vale en política?
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...