lunes, 15 de agosto de 2011

Se les quiere en puta, pero sin agresiones

"Estoy emputado", significa en nuestra jerga cotidiana "Estoy con ira, muy molesto" al grado de descontrol, quizás". "El país se convirtió en una puta", algo así como "se vende al mejor postor, vende su cuerpo y dignidad a cambio de dinero". Pero no todas las acepciones con puta son peyorativas: "se les quiere en puta" significa en nuestro campo "se les quiere demasiado". En todo caso, la palabra puta implica demasía o exceso.

Como es natural, el tema de la "Marcha de las putas" ha generado enconadas disputas, por eso me puse a revisar los carteles sobre esta actividad, ya que no pude ir.

La primera impresión es una mujer con los pechos desnudos mostrando una cadena y un crucifijo opresor. Como arte, vale, incluso el valiente semidesnudo en medio Parque Central de Costa Rica. También vi frases como "Jesús ama a las putas" que, sin alusiones encontradas, me parece bastante bien: ¿por qué no habría de amarlas como criaturas de Dios, que aconseja amar al prójimo como a ti mismo? "Ya salimos de la Edad Media" es un mensaje claro, certero y que debería caer como balde de agua fría a la Iglesia Católica. Otro acierto lógico viene cuando alguien por ahí escribe: "El día que todas las mujeres seamos putas se acabarán las putas". Obvio, ¿no? "Monseñor, ¿las niñas provocan abuso?", esta en particular es fina por sí misma. ¿Y los niños víctimas de pedofilia? Esos tampoco.

No desapruebo estas razones, no desapruebo la molestia de las mujeres, en general, de hacer su berreo para vestir como gusten, incluso si es implica desvestirse o no vestirse del todo (el desnudo humano nos libraría de cientos de problemas psicológicos y sociales). Tampoco me molesta que se manifiesten las mujeres en contra del desdichado sermón o mensaje del Monseñor, partícipe de una Iglesia retrógrada que se resiste al cambio y a amar como debe ser, sin conservadurismo vanos y estúpidos de siglos pasados.

Lo que yo en realidad no entiendo es por qué tuvieron que aplicar la categoría de putas a todas las mujeres que quieren vestirse como les plazca. Tampoco entiendo por qué, en esta manifestación, veo rótulos que dicen "¿Y a los hombres violentos, no les dice nada?" Es decir, ¿qué tiene que ver una cosa con la otra? Porque, al menos yo, he escuchado decenas de sermones contra los hombres violentos y contra la violencia familiar en las iglesias. Tampoco entiendo por qué se debe insultar a quienes creen en otras cosas, ¿por qué agredir y por qué combatir la sugerencia verbal de la Iglesia (hasta donde yo sé lo dicho por el Monseñor no es una imposición) con una violencia tan lacerante y llena de rencor?

Sea como sea, no me voy a poner en la posición de gente que se opone a toda manifestación o lo contrario, que apoya cualquier cosa. Lástima la actitud agresiva, que deteriora el buen efecto que podrían tener frases tan acertadas como "No veas putas donde hay mujeres libres" en el resto de la sociedad.

Esta manifestación es valiosa, una muestra de emancipación no solo de las mujeres, sino también de los gais, lesbianas y otros grupos sociales minoritarios. Lástima el feminismo, el homosexualismo, el lesbianismo y algunos otros grupos que actúan con revanchismo, que más bien podrían dar realce y favorecer el efecto en la sociedad, antes que deteriorarlo al final. Se tenga o no razón, nunca estaré de acuerdo con que agredir al contrario, verbal o físicamente, traiga nada positivo. Ya en nuestro país incluso hay leyes para mandar a un pobre imbécil por ofender verbalmente o tocar una mujer en público sin su consentimiento (con casos registrados), lo que falta no es más violencia, es educación y crecimiento cultural en la dirección del respeto y la diversidad, de la madurez y la evolución social.


Lo que yo sí sé es que a las putas, a las mujeres, a las lesbianas, a los homosexuales, a las feministas asertivas y comprensivas, a los hombres contemporáneos que apoyamos y criamos hijos y cambiamos pañales, cocinamos, lavamos, limpiamos y a todas las madres del Mundo, en su día, se les quiere en puta.

11 comentarios:

Roncahuita dijo...

De acuerdo amigo, la iglesia a cometido tantas tortas que casi carece de autoridad moral parea decir "suba el escote" y mucho menos paderecho a confundir la moda con la agresión.
Pero ya quisiera ver a movimientos de mujeres, homosexuales, etc. apoyando también, manifestándose contra el secuestro de nuestra democracia por los Arias y sus compinches.

Solo sentimos respeto por los miembros del clero cuando se pronuncian en temas sociales como cuando se opusieron al TLC (Aunque los mandaron a callar) o cuando como en el caso de Monseñor Hugo Barrantes habla con firmeza de defender al Ice, al ins y cuando dice "ni pensar en privatizar la salud..." Ahí están cumpliendo con un principio que es pilar del cristianismo:"ama a tu projimo..."

Geovanny Debrús Jiménez dijo...

Así es mi estimado. La Iglesia tiene más errores que aciertos para su tiempo, lamentablemente, pero también es válido destacar algunos aciertos.

En el tema sexual su posición es absolutamente retrógrada y epistemológicamente obtusa.

Yo solo me digo: "qué buena la marcha, lástima que dejara el portillo abierto para ser vilipendiada, por sus agresiones innecesarias.

Antonio Fernández dijo...

En el video que le pase ahora, Jaques Fresco hablaba de una isla donde todos andaban desnudos, y se tapaban las bolas para trepar los arboles nada mas. Dicen que no habia pervertidos, ver una mujer desnuda era algo natural. La Iglesia Catolica prohibio el sexo, y se convirtio en algo raro y sucio, a pesar de ser algo natural y necesario para salir adelante. Yo paso metido en puteros, y la unica forma en que me llevo una mujer a la cama, es que ella me vea con ojos ganosos, sino no me dan ganas. Creo que lo que argumenta Jaques Fresco es cierto.

Por otro lado, la marcha fue irrespetuosa, llena de circo y tonterias. Las catolicas tienen derecho a ser sumisas y vestir con recato, lo que no tienen derecho es a imponer sus costumbres a otras personas. Hay un lugar para todo, y no me parece correcto desnudarse frente a una Iglesia ni gritar en una biblioteca.

Geovanny Debrús Jiménez dijo...

Por ahí anda la cosa precisamente. El video y la teoría de este señor Fresco es brillante, he escuchado ya varias en esta dirección muy interesantes, voy a postear ese video.

SObre lo de la "Marcha de las Putas" pues creo que estoy siendo claro en el blog.

Antonio Fernández dijo...

Si la nota me parece clara, y agrego, en este pais los medios de comunicacion son aliados del billete, por eso basurean a la gente que no tiene billete. Yo ya he aprendido a no ponerme para que me den los medios, a veces no basta con tener razon, hay que saber como hacer las cosas. Y para un pueblo que lee los titulares nada mas, esta dificil que asocien "marcha de putas" con algo bueno. Publicidad para la Iglesia Catolica: "Vean que salvaje se pone la gente cuando deja la Iglesia".

Enrique Ceciliano dijo...

Esa marcha se las trae, fue un calidoscopio de opiniones y criterios encontrados que al final todos quedamos más perdidos que una aguja en un pajar. Primero que era para darle un escarmiento al obispo que habló en Cartago, luego que era para defender los derechos de las mujeres que visten a la moda, luego que las putas son irrespetadas y se les debe dar su lugar y por último algo sobre la agresión machista que nunca concretaron bien. Ante tal indefinición era de esperar una inasistencia a tan confuso evento. En consecuencia un total fracaso.

Heidy Murillo dijo...

En el fondo muchas personas siguen siendo muy conservadoras, en temas de DDHH será así, somos pocas quienes logramos avanzar, incluso en partidos "progre"... hay gente sumamente retrógrada en todo lado, ven a la izquierda en un sentido meramente económico, pero no en lo que se refiere a género y ambiente.
Otro ejemplo es que hay gente que aceptaría Crucitas si fuese el Estado que lo explota...

Alvaro Arnoldo Araya dijo...

En esto de las luchas sociales, la izquierda y los llamados "progres", muchas veces he cuestionado determinadas acciones, siendo parte ... por las carencias de sentido común en el orden del respeto de otras sensibilidades y lo desmedido de ciertas iniciativas. Y no es que todo debe hacerse en un sentido racional y lógico, sin darle camino a las emociones y a las reacciones ante lo que nos preocupa, o por lo que hacen los otros (as). El asunto de fondo es sumar gente a la causa, "no lastimar sentimientos como forma de convencerlas de lo malo de sus convicciones". Si lo que se quiere es empoderar a las mujeres para que ejerzan su derecho a decidir en su vestir, o en cualquiera otra acción o forma de vida, la denuncia y la protesta no tienen porque salirse del respeto de los valores de quienes directa e indirectamente pueden verse "afectados" con nuestras acciones, sin ser los responsables directos del motivo de la denuncia o la protesta. En un estado social de "construcción social en paz" la destrucción, la descalificación y la ofensa de las creencias, valores, principios y normas de convivencia en forma generalizada, no ayudan a sumar adeptos a la causa de ninguna lucha.

Guillermo Carvajal Alvarado dijo...

El contexto más amplio de la protesta tiene que ver con un malestar con la cúpula de la Iglesia católica, aunque debería ser también contra el rol de los diputados cristianos, realmente deplorable en el congreso de Costa Rica. En estas protestas que han tocado varias capitales del mundo se ha cuestionado el rol del vaticano y de todas las jerarquías de la iglesia. En el fondo el nombre dado a la marcha no reflejaba los objetivos de la marcha que era una protesta por las declaraciones dadas desde el púlpito en cuando al recato y forma de vestimenta de la mujer. En si la marcha muestra que los niveles de tolerancia y su hegemonía en el discurso moral de la población costarricense ha perdido seguidores. Es decir muchas de esas mujeres que fueron a la marcha igual irán a la iglesia, pero quieren que la iglesia no trascienda sus murallas. Y bueno otros grupos en otro nivel han pedido la laicización de las actividades del gobierno. Eso significa un nuevo modelo de comportamiento y una separación de poderes entre lo terrenal y lo espiritual. Eso es lo que puedo leer de este de movimientos sociales. Y creo que en estas circunstancias más vale mantener un nivel de comunicación respetuoso que nos pueda hacer progresar y llegar a puntos de consenso.

Geovanny Debrús Jiménez dijo...

Mi opinión no dista en mucho de la planteada aquí por don Alvaro Arnoldo Araya Alpízar o Guillermo Carvajal Alvarado, porque creo que el exceso perjudicó a la marcha y con ello a sus propósitos originales, incluso los que muy bien plantea mi coterráneo Enrique Ceciliano, como indefinidos, pero válidos puntos de lucha. Heidy Murillo Quesada tiene razón y ahí está el meollo, no toda la gente con mente abierta, la tiene tan abierta, cada uno en alguna medida y puede ser que sí, en lo ecónomico seamos más izquierda y "progres" (lo que sea que eso signifique), que en temas sociales o religiosos. Pero solamente puede ser, porque si nos damos cuenta, la mayoría católica no está en el PLN o el PUSC solamente, se reparte en todos los partidos y tendencias, y todos sabemos bien que el catolicismo es muy cerrado, pero sus seguidores no tanto, todas las mujeres tienen sexo antes del matrimonio y pierde con gusto su virginidad -como debería ser en beneficio de ellas-, pero igual van a misa y discriminan del sermón del padre lo que les parece. El católico "practicante" no es fanático como sí sucede en otras religiones, por eso esta marcha que pudo incluso generar un movimiento mayor, se quedó en críticas innecesarias. Es mi criterio y no pretendo que todos lo compartan, si algo nos define a la gente pensante es que que tenemos criterio y diferencias de ideas, no vamos "como ovejas al redil"

Adrian dijo...

que tenian que ver las putas aqui,su oficio de mas de 2000 anios no creo que ninguna de ellas estubo ahi porque lo que menos hubo fueron putas lo que hubo fue un monton de otra clases de putas las emputadas pero que parecian enojadas solas, lo que dan es pena la mujer en CR se viste como le da la gana de por si quien dice nada nadie entonces croe que fue mas las ganas de ofender que otra cosa.

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