jueves, 15 de octubre de 2015

Manual para el periodismo amarillista actual

La ética no importa mucho cuando los resultados se dan. La máxima del capitalismo y del maquiavelismo permea todos los días a la prensa sensacionalista.

En Costa Rica, por ejemplo, Elmundo.cr -un medio nuevo, antigubernamental, con pocos empleados y una interfaz de Internet simple y básicamente fea- le hace competencia brava a CRhoy.com por convertirse en el nuevo medio amarillista más visitado del país. Ese medio ya está en el 380 de Costa Rica -según la medidora de webs Alexa- mientras CRhoy.com ostenta el número 4. 



Esa competencia por el rating en Internet ni siquiera tiene causa en la búsqueda de la publicidad. Crhoy.com -financiado por Leonel Baruch, político y empresario del PUSC y banquero-, así como Elmundo.cr -financiado por quién sabe quién, aunque se presume podrían ser los Araya Monge- se mueven sin publicidad y responden a agendas políticas confusas. El más joven pone publicidad de Google que es francamente irrisoria en sus resultados según se sabe y el segundo tiene unos dos anuncios en su web; en ambos casos es dudoso que esa publicidad les produzca para cubrir los costos de producción, más aún en el caso de Crhoy.com, un medio con una inversión mayúscula. 


Pero bueno, dejemos eso, volvamos al sensacionalismo. ¿Cómo se construye el éxito de visitas que estos medios logran? La fórmula es sencilla en realidad para lograr que un medio logre viralidad y visitas por miles: 


1) Use títulos ingeniosos y manipuladores: diga que una diputada pretende prohibir campos de golf aunque ella no lo diga, sino otros actores y ella esté presente "apoyando". Y aunque la prohibición no sea el tema central ni tenga sentido, aproveche que alguien lo diga. Toda bombetada es manipulable. 


2) Revise bien las redes sociales y lea con atención lo que dicen algunos funcionarios para resaltar lo más estúpido pero que produzca más atención de la gente. Por ejemplo, el Ministro X dice: "Hoy ha sido un día cansado pero satisfactorio, hemos logrado impulsar nuevas soluciones...", entonces el título deberá decir así: "Ministro X dice estar cansado". 


3) Saque de contexto todo y concéntrese en aquello que sirva más al tipo farándula y chisme de barrio que a los ticos les encanta. "Navas echó a aficionados de la cancha", pero él estaba apurado porque su equipo perdía el partido y ya había dado las firmas a dos fanáticos. Algo también como "Presidente Solís dice sentirse cansado", aunque quizás dijo "cansado en ese momento para la entrevista". 


4) Siempre esté atento a lo negativo que eso siempre vende más, el pesimismo y lo que está mal es mejor noticia siempre. Siempre la perspectiva del título debe ser negativa: "Casos de violencia contra la mujer no disminuyeron lo que se esperaba" o "El gobierno no pudo arreglar 3 problemas en vías nacionales" (pero sí lo hizo con 17 más). 


5) No olvide aquellos temas que se parezcan a las consignas políticas y proselitistas de izquierda o de derecha que tanto emocionan a los millones de politólogos que tiene el país, digo, a todos los que comentan de política en el país a partir de frases clichés y mucho desconocimiento de todo, frases como "todos son iguales", "los políticos son unos ladrones", "todo es culpa del gobierno", "el costo de la vida sube y los salarios bajan", "no sabemos dónde vamos a parar", "estamos en crisis (eterna)"... 

6) Si puede, incluya mucho de los siguientes elementos: violencia, mujeres desnudas (con postales aún mejor, el sexo y la violencia venden) y muchos contenidos irrelevantes de deporte y política, como "Ronaldo le sonrió a unas jóvenes que lo esperaban". 

7) Revise bien la Internet por contenidos impactantes, videos y fotos que llamen mucho la atención. Haga refrito de noticias sensacionalistas aplicadas a lo nacional y use videos muy visitados en Youtube.com. 

8) De los comunicados de prensa y de las agencias internacionales obtenga lo más sensacional, es decir, lea bien con lupa y saque aquello que pueda impactar aunque no sea comprobado o solo se preste para especulaciones. Recuerde bien que el título es lo más importante, el 90% de la gente no lee los contenidos y se queda ahí, satisfecho, con el título. 

9) Siempre hable mal de las autoridades y de los líderes en general: dirigentes deportivos, deportistas que fallan, dirigentes empresariales... El político y los funcionarios siempre son los culpables, el gobierno siempre es el culpable y los demás siempre son los culpables, nunca el ciudadano ni el medio. La complicidad entre el medio y la gente promedio siempre logrará que la gente vuelva a saludarte. 

10) Use todos los prejuicios y tabúes sociales, religiosos y políticos que existen y son populares. Al homosexual perviértalo, al político sugiéralo corrupto, al indígena déjelo indigente y así sucesivamente. Trate de pervertido al mirón, de delincuente al indiciado, etc. Siempre haga culpables a los acusados, la gente necesita comer morbo de castigo y eso vende.

Finalmente depende las ópticas con que se mire, ¿podemos culpar a estos medios por aplicar una receta que los mantiene vigentes y así lograr impacto en la población?

En lo personal creo que estos medios tendrán vigencia en el mismo nivel en que la educación de Costa Rica no prepare a los ciudadanos para convertirse en espectadores críticos e inteligentes que puedan valorar mejor lo que leen, principalmente en la red para nuestro tiempo.

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